Blog Gasteiz. Gure iritzia

Debatíamos hace unos días la formulación de la Cuenta General 2012 de Ensanche 21. La formulación de las cuentas es un acto esencial y de obligado cumplimiento para los administradores de esta sociedad que no supone, en ningún caso, conformidad con la gestión realizada por la entidad en cuestión. Sólo cabe oponerse a la misma cuando uno detecta  que no se reflejan todas las operaciones realizadas durante el ejercicio a analizar, explicando en todo caso el error técnico que se ha detectado para proceder a subsanarlo.
 
Sin embargo, algunos representantes políticos del Ayuntamiento, entre ellos el más veterano y hace no mucho detentaba la máxima responsabilidad del Consistorio, han obviado todas esas consideraciones -que ellos mismos esgrimían cuando gobernaban- y se han negado a formular las cuentas. Han utilizado esta cuestión como un instrumento más para la confrontación política, para la bronca y el desencuentro. Para ellos todo vale con tal de aparecer en la foto lo más alejado del equipo de gobierno, convencidos de que así son "más oposición". Para mí, en cambio, es una postura pueril e irresponsable, cargada de complejos e inseguridades, salpicada con muchas dosis de pose política y de discurso demagógico sin límite. Una postura de oposición, sí, pero a la ciudadanía, a Vitoria-Gasteiz.
 
La no formulación de las cuentas de una sociedad de capital como Ensanche 21 puede acarrear severas sanciones para los administradores que no lo hagan e impide la fiscalización de ésta por órganos de control externo. Pero, para más inri, este año formular las cuentas era un acto totalmente necesario para poder registrar a nombre de Ensanche 21 las existencias de la disuelta ARICH, y así poder reactivar las políticas de rehabilitación en un Casco Medieval totalmente olvidado por las erráticas decisiones de PP y Bildu.
 
Conscientes de todo ello, los socialistas salieron corriendo de la Junta General para no retratarse, para no tener que posicionarse, exhibiendo su incapacidad y nula voluntad por llegar acuerdos y resolver los problemas de la ciudad.
 
Y Bildu, si bien estuvo presente, se negó a formular las cuentas, negándose de este modo a reactivar las políticas en el Casco Medieval que otrora bloquearon disolviendo la ARICH de la mano del Partido Popular de Javier Maroto. Pero tranquilos, que como nos espetó el representante de Bildu, "no importa lo que hagamos nosotros, nada de lo que advertís va a ocurrir porque ya estáis vosotros (PNV) para formular las cuentas". 

Pues eso, las cuentas  claras.

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