Cuando alguien tiene la responsabilidad de gobernar debe preocuparse de solucionar los problemas de las personas. Es cierto que este deber afecta a todo el ámbito político, tanto a oposición como a gobierno, pero también resulta evidente que este último tiene mayor obligación de dar respuestas. A fin de cuentas, el gobierno es el que toma la mayor parte de decisiones que afectan directamente a la ciudadanía.
Sin embargo, desde hace meses estamos viendo en el Ayuntamiento de Vitoria-Gasteiz un ejemplo concreto de que lo anteriormente reflejado no se cumple. Además, lo que les voy a comentar es un problema de sencilla solución, pero los parámetros en que se mueve el Partido Popular del Sr. Maroto impiden ir más allá de lo que el equipo de gobierno programa de antemano.
Desde hace un año, las madres y padres del Centro de Enseñanza Infantil y Primaria Errekabarri de Salburua, que temporalmente se encuentra en el edificio Cándido Ruiz de Garibay de Zaramaga, vienen avisando al Ayuntamiento y al equipo de gobierno del PP de que existe un peligro claro en los momentos en el que sus hijos e hijas bajan y suben del autobús, ya que lo hacen directamente en la calzada y, por su corta edad, corren el riesgo de que un simple despiste pueda acabar en tragedia. En definitiva, piden previsión y prevención antes de que pueda pasar algo grave.
La propuesta de las madres y padres de Errekabarri es sencilla: aprovechar una parte del patio del Cándido Ruiz de Garibay que se utiliza como parking para el barrio para que las niñas y niños puedan bajar allí del autobús sin ningún riesgo. Además, las plazas de aparcamiento que se viesen afectadas podrían ser utilizadas por el vecindario mediante la aplicación de un vado horario durante los momentos de entrada y salida de los niños y niñas.
Desde EAJ-PNV consideramos que la propuesta era apropiada y tenía sentido, sobre todo sentido común, porque evitaba cualquier riesgo innecesario y, por ello, la presentamos en la Comisión de Euskera, Cultura y Educación. El PP del Sr. Maroto no hizo ni caso de la propuesta alegando que en la calle Puerto de Azazeta se iban a hacer obras y que esto iba a mejorar la situación de inseguridad en la zona, pero sin dar fechas concretas sobre dichas obras.
El asunto rozó el ridículo cuando el Ayuntamiento puso unos pivotes de "protección" a veinte metros de la entrada del centro, con lo que de poca protección servían los mismos, cosa que se ha corregido hace bien poco.
Hace falta una solución urgente, porque hasta que las niñas y niños de Errekabarri tengan su propio edificio en Salburua, cada curso que estén en el colegio Cándido Ruiz de Garibay en Zaramaga como mínimo habrá un autobús más que dé el servicio de transporte al alumnado y el riesgo, por desgracia, irá incrementándose.
Por ello, hemos insistido en reiteradas ocasiones en que se tome muy en serio la propuesta de la AMPA de Errekabarri, porque es una solución de sentido común, porque es una solución sencilla a un problema que puede acabar en tragedia y porque en muchas ocasiones como ésta, las propias personas afectadas hallan una solución que es mejor que la programada por el gobierno de turno.
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